Aprender, Vivenciar, y Enseñar la paz, como objetivos de la expedición pedagógica para deconstruir y reconstruir los currículos para la paz, se dibujan y visibilizan en los colores, sonidos y formas de las aves que habitan los territorios, con las cuales establecemos conexiones vitales desde nuestras características y nos identificamos reconociendo en ellas la sabiduría propia de quien habita y anida, emigra y retorna, y se adapta a las circunstancias del tiempo y el entorno.